Caldera Mural
La caldera mural tiene esta consideración por ser una caldera que una vez instalada queda fija a una pared o paramento vertical, de ahí su consideración de caldera mural.
La caldera mural puede incorporar todo tipo de prestaciones y variantes, si tiene la consideración esta consideración significa que para ser instalada deberemos contar con un paramento vertical lo suficientemente resistente y estable para soportar su peso total.
El peso de una caldera mural varia según su potencia y prestaciones, si por ejemplo comparamos el peso de una caldera mixta con una caldera mixta con acumulación integrada de agua caliente sanitaria, los pesos variaran notablemente debido a que el agua contenida en el acumulador integrado será un peso adicional al peso de la caldera.
Una caldera normal puede pasar de 40Kg a 60 Kg según la potencia que desarrolle, en el caso de incorporar dentro de la misma caldera un deposito integrado de agua caliente de por ejemplo 40 litros de capacidad, el peso puede incrementarse en + 50 Kg o + 60Kg. Esto requerirá contar con una pared lo suficientemente resistente para soportar el peso total de la caldera con acumulador integrado que puede rondar o superar los 100 kg de peso.
Las calderas deben quedar accesible a los distintos elementos de su interior para poder desarrollar las labores de mantenimiento, por regla general la mayoría de calderas en potencias de 19 Kw a 30 Kw suele ser accesible a la totalidad de componentes desde su parte frontal. Existen marcas y modelos de calderas que especifican en sus características de montaje la obligatoriedad de dejar espacios de accesibilidad que deben respetarse en la instalación. Consulte este dato.
Debe tenerse en cuenta para los casos donde la caldera queda dentro de un armario que este no impide el acceso al interior de la caldera mural y es posible el desmontaje y posterior montaje de las carcasas de la caldera mural.